Bizcocho Invertido de Manzana y Caramelo: El dulce Perfecto para Otoño

Este bizcocho de manzana caramelizada es un clásico en mi casa, porque me recuerda a los que hacía mi mamá cuando yo era pequeña. El aroma a caramelo y canela llenaba la cocina y sabía que se venía algo bueno.

Se trata de una receta que parece más complicada de lo que realmente es. Lleva manzanas caramelizadas en el fondo, una masa esponjosa encima y, cuando lo desmoldas, ¡sorpresa! Queda con un brillo dorado súper tentador.

Lo mejor es que no necesitas ser un experto ni tener muchas herramientas. Solo hay que mezclar, hornear y voltear con decisión. El resultado: un bizcocho húmedo, con el toque justo de caramelo y un punto de canela

Algunos consejos para que te salga perfecto:

-        Las manzanas que mejor funcionan son las Golden. Aunque si quieres añadirle un punto más ácido usa Granny Smith.

-        Para desmoldarlo más fácilmente déjalo reposar hasta el día siguiente así el caramelo se afloja con la humedad de la manzana. Si no tienes tiempo y lo quieres para el mismo día, hazlo cuando aún este caliente.

Variaciones

-        Si no tienes manzanas, o prefieres otra fruta, también puedes hacerlo con peras, piña, melocotón…solo asegúrate que no sea una fruta con demasiado porcentaje de agua.

-        Puedes aromatizar el bizcocho con especias como canela, cuatro especias o jengibre.

-        Si quieres darle un toque de textura extra puedes añadirle a la masa algún fruto seco picado con nueces o almendras.

-        Si quieres convertirlo en un postre, sírvelo con helado de vainilla, yogur griego o nata montada.

Así que ya sabes, si tienes manzanas en casa y ganas de algo rico, este bizcocho es la excusa perfecta para encender el horno. Fácil, delicioso y con ese toque casero que nunca falla. ¿Te animas a probarlo? ¡Cuéntame cómo te quedó!

BIZCOCHO INVERTIDO DE MANZANA Y CARAMELO

Para el bizcocho

55 g de mantequilla fundida

85 ml de leche entera

1 huevos

85 g de azúcar

125 g de harina floja

½ cdta de polvo de hornear

½ cdta de extracto de vainilla

Para la manzana caramelizada

2 manzanas

150 g de azúcar

40 g de mantequilla

Enciende el horno a 160º C.

Pon el azúcar y la mantequilla en una cacerola, lleva a fuego y cocínala hasta conseguir un caramelo.  Vierte el caramelo en un molde de 24 x 24 cm previamente untado con mantequilla o cubierto con papel para horno. Acomoda por encima las rodajas de manzana y hornea a 160º C durante 10 minutos

Mientras se hornea la manzana elabora la masa de bizcocho.

Tamiza la harina con el polvo de hornear y resérvala.

Mezcla la mantequilla fundida con la leche y las azucares. Incorpora el huevo y la vainilla. Añade los ingredientes secos tamizados y revuelve hasta que esté uniforme, pero sin batir en exceso.

Cuando las manzanas se hayan horneado, sácalas y sube la temperatura del horno a 180º C.

Vierte la masa sobre las manzanas cocidas y frías.  Hornéalo durante 18/20 minutos o hasta que al insertar una brocheta salga limpia.

Sírvelo frio espolvoreado con canela en polvo.